Posiblemente estemos asistiendo a un cambio de tendencia en el discurrir del sector de la enseñanza concertada.
No me refiero al aspecto social/público del sector. Más bien a la realidad laboral/interna de sus trabajadores.
No nos podemos sustraer a la realidad del país. Esta es dura, desincentivadora y proclibe al desánimo. En modo alguno, admisible.
Lo cierto es que se produce un efecto extremadamente nocivo para los trabajadores del sector:
Se visualiza públicamente y sin recato que políticamente es apoyado por la derecha, cosa que ocurre, y se piensa que los trabajadores son todos afines, cosa que no ocurre, y que además en el plano laboral están razonablemente bien.
Nada más lejos de la realidad.
Sin embargo, el cambio de tendencia no va por ahí. Esto no es nuevo.
Lo cierto es que el convenio va a peor, o mucho peor. Se pretende que esté vigente hasta el 2017 y las modificaciones que propone la patronal son de tal calado, que la calidad del marco laboral resultante puede ser sensiblemente peor. Y lo que es peor, arreglar el posible desagisado resultante sería muy difícil.
Los trabajadores deben saber realmente lo que pasa y tomar conciencia de ello. Los sindicatos debemos hacer un gran esfuerzo para informar al sector y proponer lo que sea necesario para no consentir el atropello.
No es un paso atrás en una dirección concreta. Es un giro de 180 grados en sentido opuesto.
1 comentario:
Un comentario sobre el difícil momento de los trabajadores de la concertada
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